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Detenidas 46 personas de origen subsahariano, entre miembros del grupo y clientes, localizados en diversas ciudades españolas y nacidos mayoritariamente en Ghana y Nigeria
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A cambio de 2.000 euros, un suplantador se presentaba al examen identificándose con un documento falsificado, excepto cuando aspirante y usurpador tenían rasgos físicos similares que entonces utilizaba la documentación real del primero
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La organización también se encargaba de falsificar documentos de todo tipo para su venta entre la comunidad ghanesa en España, cobrando 600 euros por pasaporte, 300 euros por permiso de residencia o 150 euros por certificado
Agentes de la Policía Nacional y de los Mossos d´ Escuadra, en una
operación conjunta, han detenido a 46 personas y desarticulado una
organización criminal de origen subsahariano especializada en la
falsificación de documentos. Los arrestados suplantaban la identidad
de los aspirantes para obtener el carné de conducir a cambio de
2.000 euros. Además fabricaban cualquier tipo de documento para su
venta entre la comunidad ghanesa en España, cobrando 600 euros por
pasaporte, 300 euros por permiso de residencia o 150 euros por
certificado.
Inspección
entre los aspirantes a obtener el permiso de conducir
Las
investigaciones comenzaron a finales del año 2016. Los agentes se
desplazaron hasta la sala de exámenes teóricos de la Jefatura
Provincial de Tráfico de Tarragona para verificar los documentos
presentados por los aspirantes a obtener el permiso de conducir. Allí
detectaron irregularidades en la tarjeta de identidad de extranjero
de un ciudadano de Ghana al tratarse de un documento falso con el que
se identificaba otro ciudadano de ese país.
Fruto
de un análisis detallado de este caso, los investigadores
descubrieron la existencia de una trama criminal dedicada a la
falsificación de documentos para realizar exámenes teóricos de
conducir. Usurpaban la identidad del aspirante y, por lo tanto,
incurrían en la presunta comisión de varios delitos, tales como
falsedad documental, usurpación de estado civil y delitos contra la
seguridad vial, ya que obtienen el carné de forma fraudulenta sin
los conocimientos teóricos y prácticos necesarios.
2.000
euros por contratar a un suplantador en el examen
Los
agentes comprobaron que las personas interesadas pagaban 2.000 euros
a la organización para que un suplantador se presentara al examen,
identificándose con un documento alterado donde constaban los datos
del cliente-aspirante pero con la imagen del usurpador-suplantador.
En algunas ocasiones, si aspirante y usurpador tenían rasgos físicos
similares, este último se presentaba con el documento real del
primero.
Principalmente,
los clientes eran personas que necesitaban adquirir el carné
rápidamente, que no hablaban el idioma o que no querían estudiar.
Pasaportes
600 €, permisos de residencia 300 €, certificados 150 €
Otra
rama de la organización se encargaba de producir y vender gran
cantidad de documentos falsificados de varias clases -pasaportes,
certificados de nacimiento, certificados penales, sellos para
legalizaciones- distribuidos principalmente entre la comunidad
ghanesa en España y por los que solicitaban diversas cantidades de
dinero. Estos documentos eran utilizados para adquirir nuevas
identidades en España, obtener permisos de residencia en nuestro
país o solicitar todo tipo de ayudas y prestaciones estatales,
autonómicas o municipales.
También
clonaban las tarjetas bancarias que utilizaban los suplantadores para
adquirir los billetes de transporte cuando se desplazaban a las
distintas Jefaturas Provinciales de Tráfico.
Personas
al volante que desconocían las normas de tráfico
Al
frente de la organización, que tenía una gran infraestructura por
todo el territorio español, se encontraba un ciudadano nacido en
Ghana que tenía como lugarteniente a un varón de origen nigeriano
-experto falsificador- que creaba los documentos de más calidad.
Ambas personas contaban con varios subordinados que actuaban como
intermediarios buscando nuevos clientes y como mensajeros de los
documentos falsificados.
Tras
analizar todos los datos obtenidos, los agentes establecieron el
correspondiente dispositivo operativo y registraron seis inmuebles
–cuatro en Madrid y dos en Barcelona- donde se han encontrando gran
cantidad de documentación de personas que habrían obtenido el
permiso de conducir de esta forma fraudulenta. La investigación, que
continúa abierta, se ha saldado hasta el momento con la detención
de 46 personas en Madrid (10), Barcelona (16), Murcia (2), Logroño
(2), Vizcaya (3), Zaragoza (7), Burgos (2), Alicante (1), Las Palmas
(1), Almería (1) y Lleida (1).
El
desmantelamiento de esta red tiene especial relevancia para la
seguridad vial al evitar que se pongan al volante personas que
desconocen las normas de tráfico.